LA EVOLUCIÓN DE LA VIDA Y DE LA FORMA. CAPÍTULO III



Capítulo. III

LA EVOLUCIÓN DE LA VIDA Y
DE LA FORMA


" SIN LUGAR A DUDAS ES MAS FÁCIL CREER QUE UNA PIEDRA SE CONVIERTA CON EL PASO DEL TIEMPO EN UN ORDENADOR, QUE PENSAR QUE TODO EL COMPLEJO SISTEMA DEL CEREBRO    HUMANO HAYA SALIDO DE UNA FORTUITA EXPLOSIÓN CÓSMICA Y DEL AZAR "
 
Para el estudio integral de la manifestación de las cosas y de los seres, es esencial comprender que existen DOS ASPECTOS fundamentales dentro de la Creación-Una, y nos estamos refiriendo al ASPECTO VIDA, y al ASPECTO FORMA, siendo las dos complementarias y necesarias para la manifestación de cualquier ser. El aspecto Vida es subjetivo, invisible, es aquello que alienta que mora dentro de las cosas, dentro de las formas, es el alma el espíritu que sustenta la vida, siendo la VIDA EN SÍ MISMA. Y el aspecto Forma es el envoltorio de la vida, es el cuerpo o recipiente material para manifestarla en algún plano de la existencia.
            La ciencia moderna hasta ahora sólo puede estudiar el aspecto forma de las cosas, su aspecto material, sus células, moléculas, rugosidad, densidad, humedad, dureza, etc. Trata con el cascarón, con la superficie, con el aspecto objetivo de la existencia, ya sea en el estudio de una roca, de un vegetal o un ser humano. Sin embargo todavía no puede ahondar en el Misterio de la Vida. ¿Qué es la vida?, ¿dónde esta?, ¿cómo aparece en el juego de la manifestación?. Tengamos presente que la Vida no puede ser observada con los sentidos físicos, solamente la percibimos cuando actúa a través de un cuerpo, de una forma determinada. Observemos por ejemplo al hombre, científicamente es una conjunto de masa corpórea: huesos, arterias, músculos, líquidos, vísceras, piel, etc. Un conjunto de elementos químicos funcionando armoniosamente. Pero, ¿cuál es la fuerza motor para dicha manifestación ordenada. ¿Cuál es el impulso subjetivo, profundo, esencial y vivificador, para hacer que todo el sistema de masa corpórea, viva, sea consciente, tenga esperanzas, ternura, amor, y tenga un instinto de evolución. La respuesta es materialmente difícil, pero aquí, el azar, la casualidad, las coincidencias, tienen poca cabida en este Planeta colmado de vida. Pongamos un ejemplo, situemos a dos personas en el suelo, una que este durmiendo, y la otra que acabe de fallecer, si los miramos a cierta distancia no sabríamos distinguir quién esta vivo, o quien esta muerto, ¡verdad!, ¿porqué?, pues porque la VIDA no se ve, sin embargo esta presente en todas las criaturas del universo, incluso después de haber ”muerto”, el proceso de desintegración y putrefacción índica que la “vida” sigue presente, la vida de muchos elementos menores o microscópicos están tremendamente activos. Así pues, la Vida se puede definir como el Soplo Sagrado, aquello Divino que habita en todos los seres, y en todas las cosas y que no pertenece al reino material, sino al espiritual.

            Esos Dos Grandes Aspectos pueden ser visualizados como los dos ”Polos Magnéticos”, positivo y negativos de la creación. En nuestro actual Universo la “DUALIDAD” es una constante en todo lo manifestado. Es el Logos, Dios, expresándose como el PADRE y la MADRE del universo. Veamos las siguientes correspondencias esotéricas.

               Aspto. VIDA                        Aspto. FORMA
           
               Espíritu                    Cuerpo
               Padre                        Madre
               Positivo                    Negativo
               Interno                     Externo

            Tengamos presente que Dios, no es el positivo ni el negativo, tampoco es un hombre o una Mujer. El Creador, el Hacedor, es el conjunto de todos los aspectos posibles, más allá de una forma determinada, es Espíritu, por lo tanto no se manifiesta como Dualidad, sino como Unidad Inquebrantable e Inmutable en Su Magna Divinidad. Pero para comprender mejor este proceso de creación dual, Dios, como Espíritu Puro, y dentro de Su Gran Plan Divino, se desdobla de Sí mismo, alejando parte de su propio Ser, y produciendo, en este colosal despliegue, y mediante la Ley de Entropía, un enfriamiento, una condensación de energías, que producen o instauran diversos grados de materia, que a su vez, conducen a la formación de múltiples Planos o dimensiones, Sistemas, Planetas, reinos naturales y elementos atómicos, moleculares y químicos de todo tipo. De esta forma simple en apariencia podemos intuir el proceso que sigue la Involución de la Energía sutil en Materia densa. Dios es un Gran Fuego Creador, y a medida que Su “fluido” su “lava divina” se va alejando de su núcleo, se va enfriando, endureciendo, y creando en tiempo y espacio “numerosas islas” universos y mundos por doquier.
            Y a pesar de todo, Él lo sigue siendo “TODO”, el fuego y la lava, la energía y la materia, el cuerpo y el espíritu, pero en diferentes estados de condensación. Por esa razón, en los estudios esotéricos encontramos la positiva afirmación que nos dice que “Dios no solamente esta en todas las
partes, sino que Él es todas las partes”, no habiendo nada fuera de Él, ya que en Su aura vivimos, nos movemos y tenemos nuestro ser... La roca, el árbol, un planeta, un átomo, el elefante, la brisa, el ser humano, ¡todo es Dios!, en un nivel o estado más o menos denso, o más o menos sutil de manifestación. Cuanto mayor es la complejidad o evolución de la Forma, mayor es la expresión de la Divinidad dentro de la misma. La divinidad que puede manifestar una piedra, es diferente en cuantía a la divinidad que puede manifestar una rosa. Así también la divinidad, la inteligencia o el amor que puede expresar un tigre es inferior a la que puede manifestar un hombre, y más allá de lo que un ser humano pueda manifestar encontramos otros diferentes Reinos Espirituales dónde existen un mayor despliegue de facultades y virtudes “divinas”.
            Tanto el aspecto vida, como el aspecto forma se necesitan para evolucionar. El espíritu necesita un cuerpo denso para experimentar en diferentes nivelas de la creación. La Madre Tierra provee de un vehículo de manifestación para el espíritu o aspecto Padre. Los sentidos ordinarios sólo pueden percibir el escenario de la vida objetiva, sin embargo aquello que esta detrás del escenario, que sabemos que es aún más importante, no lo percibe, pero sin embargo existe, y su existencia es mucho más real y auténtica que ese escenario. Pero ¿qué sentido tiene toda esta actividad creadora?, ¿hacia dónde se dirige?. Toda esta Fuerza Subjetiva que impele a la evolución continua, queda resumida, en lo que expone tan bellamente H.P.Blavaski, cuando dice, en su monumental Obra "La Doctrina Secreta":

Todo el orden de la naturaleza revela una marcha progresiva hacia una vida superior. Hay un designio en la acción de las fuerzas aparentemente más cie­gas. Todo el proceso de la evolución, con sus adaptaciones interminables, es u­na prueba de esto. Las Leyes inmutables que escardan a las especies más débiles y endebles, para dar cabida a las fuertes y que asegure la "supervivencia de los más aptos", aunque tan crueles en su acción inmediata, todas trabajan rumbo al gran fin. El hecho mismo de que efectivamente ocurran adaptaciones, de que los más aptos sobrevivan efectivamente en la lucha por la existencia, demuestra que lo que se llama "naturaleza inconsciente" es en realidad un agregado de fuerzas, manipulado por Seres Semi-Inteligentes, guiados por Altos Espíritus Planetarios, cuyo agregado colectivo forma el Verbum Manifestado Del Logos Inmanifestado, y constituye a un mismo tiempo la MENTE DEL UNIVERSO y su LEY INMUTABLE."

            Profundizando un poco más en la Excelsa Obra de la evolución, encontramos que mediante la combinación de esos dos Aspectos Fundamentales de la Creación Universal: Vida-Forma, surge un TERCER FACTOR o ASPECTO, LA CONCIENCIA, EL ALMA o LA CUALIDAD de las cosas. Tras la sagrada unión entre Padre-espíritu y la Madre-Materia, nace o es fecundado en el seno de la existencia el HIJO, que viene a ser el agente evolucionante, el punto medio y mágico del Amor Divino, e intermediario cósmico entre el Cielo y la Tierra, entre la Vida y la Forma. De esta mística ciencia se cierra el círculo y el misterio de la Santísima Trinidad: Padre, Hijo y Espíritu Santo (Madre), forman una sola persona. Esta esotérica Trinidad reside en el trasfondo de todo lo creado, y es la clave Kabalística de muchos procesos mágicos y espirituales. Es la Ley del Santo Tres. De Hecho la creación entera podría ser estudiada mediante el Uno, que luego se transforma en Tres, y éste se ramifica en Siete. A efectos prácticos, para ampliar nuestra visión interior y nuestra consciencia, podríamos observar serenamente a nuestro alrededor, a los objetos, al libro, a las plantas del jardín, a nuestro gato y dentro de nosotros mismos. En todos ellos encontraremos, funcionando necesariamente, a esos tres Principios Universales; La forma material que lo envuelve todo, su rugosidad o suavidad, su dureza y elemento natural; A su Conciencia y Cualidad que le aporta: olor, diseño, color, belleza y armonía, y a la Vida Interna, a esa innata Gran Voluntad de existir y evolucionar que reside en todo y en lo más profundo de cada átomo, cada hombre y cada planeta.
            Recordemos que el segundo aspecto anteriormente mencionado “la forma”, pasa ahora ocupar el tercer aspecto, ya que el segundo aspecto es ocupado por el “hijo”, la Cualidad de las cosas, producto de la unión Padre (vida) - Madre (forma).


Veamos las siguientes TRILOGÍAS reveladoras:

1º Aspecto      2º Aspecto      3º Aspecto

Padre               Hijo                 Sto.Santo. Madre  (Trinidad Cristiana)
Shiva               Visnhu             Brahama              (Trinidad Hindú)
Osiris                 Horus                         Isis                      (Trinidad Egipcia)

1º Aspecto      2º Aspecto      3º Aspecto

Vida                Cualidad          Apariencia. Forma
Voluntad         Amor               Inteligencia. Luz
Espíritu                        Alma, Ego       Cuerpo
Protón              Neutrón           Electrón           (Trinidad atómica)
Energía                        Fuerza             Materia
           
            Estudiemos ahora como se produce la “evolución” en sus dos vertientes, interna y externa, visible e invisible. Aunque nos detendremos más sobre el aspecto “invisible” esotérico del tema, ya que el aspecto objetivo, material de la misma, ha sido y es actualmente estudiada por la ciencia, y esta avanza formidablemente en dichas investigaciones, y sus resultados los podemos consultar en cualquier momento, y en cualquier enciclopedia correspondiente. Podríamos comenzar diciendo, que en algún momento determinado en la vida de Ese Gran Ser al que llamamos Logos, o Dios, decidió emprender la ardua tarea de la Creación, y no sabemos, evidentemente, cual fue Su Razón Original, pero sí que podríamos decir, que fue la “Fuerza Primaria” el “Poder o Impulso Necesario” que origino esa gran explosión cósmica, que los científicos y astrofísicos llamaron Bing-Bang. Quizás esta teoría, los científicos logren esaverarlo algún día de una forma rotunda, pero aunque así lo hiciesen, y mostrasen cual fue su desarrollo posterior, jamás podrían saber el ¿por qué?, la CAUSA ORIGINADORA de dicha explosión, eso esta fuera del alcance humano.

            Observemos nuestro Planeta, dentro de él habitan diferentes Reinos. Reinos que se integran armoniosamente, y cada cual ocupa su espacio y su desenvolvimiento natural en el esquema de la vida y de la evolución. Tenemos al reino mineral, al vegetal, al animal y al cuarto o humano. Esotéricamente existen otros reinos por debajo del mineral, llamados Reinos Elementarios, tres en total 1º, 2º, y 3º Reino Elemental. Pero también encontramos otros por encima del Reino Humano, aunque el ser humano avanzado, puede participar de ellos. Los Reinos Dévicos o Angélicos también tienen su lugar esencial dentro de nuestro planeta, ya que participan de una forma muy directa dentro de él.

EL REINO MINERAL.

Cada Reino es el cuerpo de manifestación de una serie de vidas menores que habitan dichas formas físicas, de hecho sólo existe vida en todo lo creado. Observamos que dentro del fabuloso reino mineral se encuentran innumerables formas, piedras, cristales, metales etc. Y dentro de cada grupo mineral, en los niveles internos, en los planos sutiles, encontramos una vida elemental, un pequeño ser, que experimenta, vive y evoluciona. La “vida” siempre proviene del Plano Monádico, el segundo de los siete, y desde ese altísimo nivel, desciende una pequeña avanzadilla DE Su propia Vida y Conciencia hasta los planos inferiores, introduciéndose en un envoltorio físico, ya sea mineral, vegetal o animal. El Espíritu desciende desde lo alto y se infunde en la materia para dotarla de Vida. Cada grupo de mineral determinado, por ejemplo el de los diamantes, contiene en los Planos Superiores un “ALMA GRUPAL”, que es el encargado de recoger todas las experiencias, todos los incidentes, ya sean por ejemplo: el calor, la erosión, la humedad la presión, etc, etc. Y las asimila las experimenta y de esa manera enriquecedora, todo los diamantes en conjunto, en “grupo”, evolucionan hacia un “Arquetipo” especial. Como se vera, no estamos hablando de almas o seres individuales, ya que los minerales no tienen una estructura o una anatomía concreta para que un solo ser pueda habitarlas, sino que hablamos de “ALMAS GRUPO”, teniendo como cuerpos de expresión determinados conjuntos. Así, también, por ejemplo, la amatista, el hierro, el oro, el cuarzo, etc, tienen sus respectivos “Alma Grupo”. Y de esta manera pueden ir evolucionando, perfeccionándose, conjuntamente, hacia realizaciones más complejas y más hermosas.
            Los terremotos levantan la corteza terrestre, los volcanes vomitan lava y el mar azota las peñas y desmenuzan las rocas hasta pulverizarlas en finísima arena. Este violento trato tiene por objetivo provocar una respuesta de la VIDA DURMIENTE en las densas formas del Reino Mineral. En la Edad Media dijo un Sa­bio Instructor Sufí: "DIOS DUERME EN EL MINERAL". En efecto, la vida en este Reino no está todavía dispuesta a volverse hacia el exterior ni a mirar a través de su envoltura, por lo que violentos contactos tienden a DESPERTAR al durmi­ente Espíritu. Desde innumerables edades de análogas y repetitivas impresiones, las partículas de materia viviente van dando irrebatible prueba de responder desde DENTRO, al estímulo del exterior. Dios Geometriza, y cualquier investigador se queda asombrado al ver la maravillosa y perfectas estructuras moleculares de los cristales. Hoy en día oímos hablar mucho sobre las propiedades curativas o benéficas de las piedras “Geomancia”, y así es, cada roca contiene en su interior un poder, una fuerza, una vida espiritual, dormida pero latente que afecta al ambiente.
La evolución de la materia comienza desde los elementos más simples a los mas complejos, y el encargado de guiar y dirigir dicha tarea es la “inteligencia interna” del “ALMA GRUPO”. Con esta afirmación podemos comprender, que antes que existiera el diamante, otros minerales menos nobles iban evolucionando hasta alcanzar ese estado de depurada perfección geométrica. Después de millones y millones de años de experiencias tras experiencias, las “Almas Grupo” van construyendo mejores y más nobles cuerpos de manifestación. Eso es la EVOLUCIÓN, una fuerza subjetiva que afecta formidablemente a su cuerpo o envoltorio de manifestación objetiva o física.

REINO VEGETAL.

            Cuando el grupo mineral más avanzado, como por ejemplo el “alma Grupo” de los diamante, llega a su apogeo evolutivo dentro de su propio reino, siente la necesidad imperiosa de seguir su evolución hacia formas más complejas de vida y de conciencia. Entonces “da un salto” e ingresan en las más simples variedades del Reino Vegetal, como por ejemplo el moho.  El fenómeno llamado “radioactividad” es una de las puertas por donde suelen hacer esa transferencia o trasmigración anímica de un reino a otro, del reino mineral al vegetal.
            Una vez que la vida interna o el ser que ha experimentado a través del mineral-diamante pasa al reino vegetal, empieza un nuevo y más amplio peregrinaje, en el camino infinito de la evolución. En dicho reino ingresa, como es natural, en las especias más simples del vegetal, para luego ir ascendiendo en complejidad y experiencia. Hay una gran diferencia entre la brizna de hierba, y el fabuloso y robusto roble de la selva. De un hongo, a la Belleza inaudita de una rosa. Dentro del reino vegetal existe ya una gran evolución palpable. Y muestra de ello lo tenemos en la “misteriosa sensibilidad natural” de las plantas. Las plantas no tienen un sistema nervioso como el del animal, sin embargo son muy sensibles a la luz solar, a la humedad, al calor y al frío, y últimamente se esta estudiando la respuesta del vegetal a la música, a la vibración del sonido y a los efluvios de afecto de sus cuidadores. Un campo, este último, que dará muchas y  grandes sorpresas. ¿Cómo se pretende a veces discutir sobre si las plantas tienen o no alma?. Acaso no comen, no crecen, no       se reproducen, no viven y mueren. Si no tuvieran alma, nada de eso podrían hacer. Donde hay vida, donde hay evolución y movimiento sensible hay alma, ya que el alma es la vida, el impulso subjetivo que anima a cualquier forma.
            Desde el punto de vista esotérico, el reino vegetal es el reino que ha alcanzado su mayor evolución o perfección, ya que los demás reinos todavía no han alcanzado su plenitud evolutiva dentro de ese Gran Plan Planetario. Es fácil concebir esto cuando observamos serenamente la belleza, el aroma,  la sedosidad y el color de una Rosa. Su forma geométrica perfecta, sus pélalos armónicamente dispuestos y su devoción al sol. A través de las plantas se puede curar prácticamente todo, y a través e ellas se puede expresar muchos sentimientos humanos y de relación. Cuando queremos decir “te quiero” regalamos una rosas rojas”, cuando simbolizamos “pureza” regalamos flores blancas, a así, etc, etc. También el aroma o el perfume de las plantas son capaces de elevarnos en pensamiento, en devoción. El perfume por ejemplo del sándalo, es capaz de purificar un espacio a nivel astral, y a la vez es capaz de ayudarnos en la relajación y en la meditación. Muchas propiedades y en diferentes niveles tienen su acción el reino vegetal. Ciertamente existe un gran poder oculto dentro de este majestuoso reino.
            Al igual como ocurría con el reino mineral, también en el reino vegetal esta constituidas por las “Almas Grupo” de cada especie. Cada una de esas especies van tomando y recogiendo experiencias que van volcando en su alma-grupo particular, para que toda su especie salga beneficiada, y evolucionen a la par. Cuando la vida interna ha adquirido mucha evolución pasa a otra especie vegetal más apta a su nuevo grado, y así hasta alcanzar las formas vegetales más evolucionadas.
            Cuando decimos que las plantas tienen vida interna, pensemos que no es exactamente una vida individual, sino colectiva, y aunque en apariencia son individuales, en los planos internos o astrales, es la manifestación parcial de una gran entidad, a la que llamamos “ALMA GRUPO”. Si tuviéramos visión etérica o astral veríamos que dentro o alrededor de cada mineral o de cada planta existe lo que se llama en ocultismo esencias elementales. Los gnomos y los elfos del bosque, las ondinas y nereidas del agua, los silfos y las sílfides del aire, y las salamandras del fuego son los encargados invisibles de animar y cuidar cada roca, cada planta y animal. De hecho aunque parezca un poco caricaturesco y hasta infantil estas afirmaciones, la realidad supera por mucho a cualquier ficción. Estos ELEMENTAES DE LA NATURALEZA son realmente los custodios a nivel inferior de todos los elementos físicos de nuestro planeta, la vida elemental de todas las formas y de todos los cuerpos que son engendrados por la Madre Naturaleza, son  formados y modelados por ellos. Los “elementales” son los trabajadores que crean y cuidan la naturaleza, pero no son los dueños de ella, ni hacen lo que quieren, sino que están supeditados a Jerarquías Espirituales más elevadas, como son los Ángeles, los Arcángeles, Las Potestades, los Querubines, Serafines, etc, que en grado mayor son los responsables de la Creación del Universo Manifestado.

EL REINO ANIMAL
           
Dios, el Logos revela sus cualidades y su potencial en mayor o menor grado de “limitación” según en la forma o reino en que se manifieste. Esta limitación es cada vez menor en la medida en que se manifiesta a través de reinos más elevados. De al suerte que mediante los cuerpos animales puede expresarse con mayor libertad, aunque como es lógico, su divina presencia esta todavía muy lejos de alanzar Su Plenitud. Es necesario tener una idea clara de lo que representa el ALMA-GRUPO ANIMAL para comprender con claridad la evolución de los animales. Por ejemplo, un delfín a pesar de su alta evolución animal, y su contrastada inteligencia, no posee un “EGO” definido. Cuando el alma de un ser humano abandona el cuerpo físico, él sigue existiendo como entidad separada, es decir, como individuo fuera del cuerpo, en el plano astral. Sin embargo cuando la esencia espiritual de un delfín abandona su cuerpo, esa “esencia invisible” o “Mónada” vuelve a fusionarse al Alma –Grupo de los delfines. Supongamos que una de estas almas grupales anima por ejemplo a cien elefantes, cada uno de ellos será animado por una centésima parte del Alma-Grupo mientras viva en un cuerpo físico. En apariencia es tan individuo un león como un hombre, sin embargo en la realidad espiritual no lo es. Cada león donde quiera que esté adquiere muchas experiencias que ayudarán a todo el grupo como un solo Ser. Así se explican los instintos hereda­dos, tal es la razón de que el pato recién salido del huevo se zambulla inmedia­tamente en el agua sin que nadie le haya enseñado a nadar. De que el polluelo tiemble ante la sombra de un halcón e intente esconderse; de que el ave incubado artificialmente, sin haber visto jamás un nido, lo fabrique hábilmente según la costumbre de su especie, etc.­
Especialmente los animales llamados “domésticos”, o aquellos que están estrechamente relacionados con los hombres tienen una mayor evolución. El afecto emocional es un trampolín evolutivo para ellos. Los animales vienen al contacto del hombre para despojarse de sus instintos salvajes y desarrollar sus cualidades superiores. Muchos son los que tratan amorosamente a sus mascotas, y a su vez reciben  de ellos una increíble fidelidad, signo inequívoco de madurez mental y estabilidad emocional aunque estemos hablando de animales. El animal no tiene intelecto pero sí instinto, que es el agente superior de la supervivencia y adaptación al medio. El hombre puede ayudar mucho a este reino, y de hecho es muy responsable de su futuro y evolución. Los animales son nuestros hermanos menores, y es necesario crear lazos y puentes de afecto entre los dos. Muchos tratan equivocadamente de potenciar las cualidades de fuerza, velocidad y ferocidad en los animales, para su disfrute y diversión, como por ejemplo en las carreras de caballos, en los combates de perros, o en el adiestramiento de caninos para defender una propiedad. Todas estas actitudes van en contra de la evolución, de la humanización y tienen como resultado una trasgresión de la Ley espiritual. Mediante estas disertaciones sobre la evolución, cabe fácilmente constatar que no existe realmente una brecha insondable entre los diferentes reinos de la naturaleza, y todos ellos siguen un camino de evolución y progreso conjunto, resultante de un Diseño Cósmico, de un Plan Divino, donde el aspecto Vida es la primera fuerza motriz de toda la existencia fenoménica. El mundo invisible es mucho más amplio y real que el visible o material. 

EL CUERTO O REINO HUMANO                                             

Es nuestro actual reino, el reino HUMANO, esta compuesto de Hombres y Mujeres de todas las razas de la tierra, y es el resultado de una larga y difícil evolución, desde las primeras esencias elementales, pasando por el MINERAL, VEGETAL y ANIMAL. La Sabia Naturaleza y el Propósito Divino han tenido que trabajar duro y tenazmente durante millones de años,  para llegar a construir un CUERPO, con un MECANISMO tan complejo y maravilloso como el nuestro, para poder albergar dentro de él a UN HIJO DE DIOS, el ESPÍRITU DEL HOMBRE, el reflejo de Dios hecho carne. Es toda una obra de Ingeniería Maestra y el resultado de una augusta y extraordinaria INTELIGENCIA. ¿Cómo todavía se puede dudar de un CREADOR?... En este cuarto reino, ya no dependemos para evolucionar de un alma-grupo, sino que cada individuo evoluciona por separado, individualmente, y es dueño de su evolución y de su propio destino. El ser humano posee la INDIVIDUALIDAD, evoluciona individualmente, independientemente de los demás, aunque está UNIDO internamente con todos sus hermanos. No puede transferir sus experiencias y su Sabiduría a otros, pero si puede ayudarles a encontrarla. Cuando desencarna (muere), sigue existiendo como individuo, llevando con él todo el cúmulo de experiencias aprendidas, siendo ese su bagaje para su próxima encarnación. Cada hombre tiene un espíritu, o más bien dicho, cada hombre es el Espíritu. Cada hombre y cada mujer es un hijo de Dios. Y todo el problema humano radica en esta base. El cuerpo del hombre pertenece a la naturaleza, es de origen animal y por lo tanto contiene una inteligencia natural llamada instinto, que comparte con el reino animal. Sin embargo, el “HOMBRE” contiene dentro de sí, otro aspecto, que no es natural, que no pertenece a la Madre Naturalaza y es de origen Espiritual o Divino. Es el ESPÍRITU DIVINO que le confiere, como ya hemos dicho la individualidad, y el Fuego DEL INTELECTO. En los próximos capítulos abordaremos este tema, ya que es el más esencial de todos y el más revelador.

Existen 7 Puertas de Entrada al Reino Humano. Siendo dos las evoluciones o líneas caninas y felinas. Actualmente estas puertas de entrada al reino humano están cerradas para el reino animal, debido esencialmente a la evolución alcanzada ya por el ser humano. Cuando el conjunto de la humanidad penetre en el Quinto Reino o Espiritual, podrán nuevamente abrirse las puertas para el ingreso del animal al humano. Pero hasta entonces se hayan, esotéricamente selladas, por el Karma engendrado por la propia familia humana.

La Divinidad que puede manifestar el genero humano es formidable. Dentro del ser humano encontramos un abanico de niveles de evolución muy amplios, desde el vil criminal, egoísta y astuto, hasta el misionero que da la vida por los demás. Desde el salvaje que es dominado por sus instintos más bajos, hasta el Maestro de Sabiduría, como el Buda o el Cristo que manifiestan las cualidades más elevadas del Espíritu Omni-abarcante, siendo perfectos canales de manifestación de la Divinidad Inmanente y Trascendente.

El Quinto Reino. El Espiritual. El Reino
De Las Almas Evolucionadas.
                           
El ser humano no es el último escalafón de la evolución como suponen algunos, por encima de él en un peldaño superior se encuentra el QUINTO REINO, el reino de las Almas evolucionadas, como por ejemplo los Discípulos, Iniciados, Adeptos y Maestros de Sabiduría, la cual representa nuestra próxima meta en la escala de la evolución. Todavía no es muy numerosa y entre otros la componen actualmente las Almas más evolucionadas de la humanidad, algunos con cuerpo físico y otros trabajando en niveles superiores estando desencarnados. También la componen Seres altamente Espirituales; Entidades Planetarias y Extraplanetarias. A este Conjunto de Seres Iluminados se les conoce esotéricamente como LA JERARQUÍA ESPIRITUAL DELPLANETA, o la GRAN FRATERNIDAD BLANCA; y aunque este Reino es de momento subjetivo, trabajando intensamente detrás del escenario de la vida material, poco a poco se está exteriorizando, y esto ocurre en la medida que la humanidad como un TODO va DESPERTANDO a su verdadera "REALIDAD ESPIRITUAL­ ".

“La Exteriorización De La Jerarquía Espiritual Es Uno De Los Grandes Acontecimientos Que Se Vera Cumplida Para Nuestra Actual Y Reciente "Era De Acuario".